Ambas finales de conferencia llegan al tercer partido con el mismo resultado, pero sensaciones muy distantes. Al menos nos hemos salvado del 3-0 que eliminaría todo tipo de incógnitas, tensión y dramatismo necesario para continuar pegados a estas eliminatorias. Los Thunder abandonan su competitividad en casa para llegar a Minnesota y ser barridos por unos Wolves que todavía pueden dar un serio susto al máximo candidato. En el Este, unos Pacers con el partido en la mano, cedieron la contundente ventaja para dejar vivos a unos Knicks que esta vez se agarraron a Karl-Anthony Towns como héroe inesperado, pero de sobra cualificado.